SECCIÓN 31/COMANDO DELTA Cap. 20

Cap. 20 (Thargor)

Para una persona que le gustaba tener una vida metódicamente calculada, y predecible, estas últimas semanas habían sido toda una prueba de fuego para él. Sentado en ese transporte terrestre, y al lado de una mujer que hacía unos minutos que acababa de conocer de una manera más bien curiosa, por su cabeza pasaban los últimos acontecimientos…..

El último rencuentro con Julian K, fue realmente extraño, y ahora se presentaba una andoriana diciendo que la enviaban de la sección 31 y se presentaba de la manera más extraña salvándole la vida, ¡a él!, una persona con un alto índice paranoico.

¿Era cosa de julian K o de la persona que animó a Llorenç a formar el comando, y que prácticamente no conocía? La verdad, empezaba a dudar de la sección más carismática de la Federación, tenía la sensación de estar trabajando en contra de ella. Tenía muchos defectos, pero su fidelidad hacia la Federación era indiscutible. 

En su cabeza no dejaba de rondar la idea de que todo era una trampa, pero ¿de quién?, ¿para qué?  y esa andoriana no le daba ninguna sensación de confianza.

Además estaba esa extraña transmisión que captó en la habitación el otro día, era de un nivel de encriptación y camuflaje muy sutil, no consiguió descifrarla ni identificar su origen, y eso aumentaba su paranoia. No había dicho nada a sus compañeras, no quería contagiarlas, pero necesitaba ayuda para resolver ese misterio.
Dejo a un lado sus pensamientos y se quedó mirando a esa belleza azul

-¿Como decías que te llamas, muñeca?

-No soy tu muñeca, y ya me han avisado de tus patéticos encantos.

-No te enfades, no le sienta bien a esa cara tan azulada.

-Me llamo Pandora, y si, eres patético.

-Okey Pan.

-Pandora. ¿Te queda claro?

-Si tú lo dices, mira, no sé de dónde vienes, ni si fiarme de ti, como comprenderás, ni en sueños vamos quedar con el resto del grupo, hasta que no verifique si eres quien dices que eres.

El transporte se detuvo de repente y se abrió la puerta de la derecha.

-Pues mientras verificas, y contrastas información, te irá bien pasear un poco, o sea, que aquí te bajas. Te espero en la ciudad.

  
-¡No serás capaz de dejarme aquí en medio de la nada! ¿Qué será de ti sin mi  encantadora compañía, Pan?

Thargor tardó un par horas en llegar a la ciudad, Esa andoriana ya le caía mejor, pero mataría por una cerveza en ese momento. Y se fue directo al primer local que encontró abierto. Una vez consumió su primera cerveza, saco su tricorder y se puso en contacto con B’Elena.

-Mi visita Barsoon City ha sido digamos... sorprendente.

-Últimamente todo son sorpresas.

-¿Cómo esta T’Alize?

-Ese mata sanos es bueno, esta mañana ya quería romperle todos los huesos a McCoy.

-Pués es una buena noticia, deberíamos de cambiar de madriguera, la actual ya no es segura.

-¿Qué pasa Thargor? Ese tono de voz no me convence.

-¿Cómo te lo diría….? ¿Cómo te llevarías con una preciosidad azulada?

-¿Azulada? Si traes a una andoriana, te prometo que saldrá corriendo con un color añil muy bonito.

-Pues igual no depende de mí, viene de arriba, muy arriba.

-¡Andoriana! Que ni se le ocurra ponerse delante mio, odio a los pieles azules. ¿Me oyes? De fondo se oyó la voz de T’Alize.

-He estado investigándola durante dos horas, y parece limpia, y es una imposición de los de arriba.

-¿Será cosa de ese JulianK, Thargor? Tengo una cuenta pendiente con ese hombre.

-No lo se B’Elena.

 
-Pero algo me dice que pronto tendremos noticias suyas.

En ese momento alguien se sentó al lado de Thargor, y pasándole una cerveza bien fría le invito a brindar.

-¿Qué me dices Romeo, ya soy de fiar o tendré que buscarme a otro grupo más competente?

Continuará...